La tradición castellana que protege el hogar desde tiempos antiguos
¿Que es ese ramo en la puerta de las casas0 ? Si alguna vez has paseado por un pueblo de Castilla la mañana del 24 de junio y te has fijado bien en las fachadas, es posible que hayas visto algo curioso: un pequeño ramo de plantas colgado sobre la puerta o en una ventana. Puede ser de romero, lavanda, hinojo o incluso ramas de árboles del entorno. Aunque a primera vista parezca un simple adorno, ese ramito tiene un significado profundo. Se trata del ramo de San Juan, una tradición ancestral que muchas familias siguen manteniendo viva año tras año.
En Quesería La Antigua somos muy de pueblo, muy de costumbres que no están escritas en los libros pero que se transmiten de generación en generación. Y esta es una de esas tradiciones que nos gusta conservar, contar y compartir.
🌿 El origen: protección, limpieza y buenos deseos
El ramito de San Juan tiene un carácter protector. Se cree que colgarlo en la puerta ayuda a purificar el hogar, alejar enfermedades, malas energías y lo que en los pueblos se conoce como «mal de ojo». Aunque no hay una versión única del ritual, muchas casas siguen un patrón común que tiene su punto más especial entre los días 23 y 24 de junio, coincidiendo con la celebración de San Juan y el solsticio de verano.
🌱 ¿Cómo se hace el ramo de San Juan?
La tradición comienza el 23 de junio por la tarde. Ese día, muchas familias —sobre todo en zonas rurales de Castilla y León— salen al campo, al jardín o al monte a recoger las plantas con las que se hará el nuevo ramo. La elección de las hierbas no es casual: se buscan plantas que tengan propiedades curativas o protectoras, como el romero, la lavanda, el hinojo, el tomillo o el laurel.
Una de las particularidades más bonitas de esta costumbre es que se elabora un ramo por cada niño que vive en la casa. Es un gesto simbólico que añade un toque personal a cada ramo y que refuerza la idea de que el objetivo es proteger a los miembros del hogar.
🔥 La hoguera de San Juan: cuando se quema el ramo viejo
Ya entrada la noche, exactamente a las 00:00h del 24 de junio, se encienden las hogueras de San Juan, otro de los rituales más antiguos y extendidos en toda España. En muchas localidades, junto al fuego se lleva a cabo otro momento clave de esta tradición: quemar el ramo del año anterior.
Ese ramo, que ha permanecido colgado durante todo el año en la puerta de la casa, ya está seco y representa el ciclo que se cierra. Se quema para dejar atrás lo negativo, purificar lo vivido y empezar un nuevo año con energía renovada.
🌞 Y el día 24… el nuevo ramo ya cuelga del hogar
Son muchas las casas que ese mismo día 23 al caer la noche o con el amanecer del 24 de junio, se cuelga en la puerta de casa el nuevo ramo recogido el día anterior. Ese será el que permanezca todo el año en la fachada, protegiendo la vivienda y a los suyos. Y así se repite el ciclo, año tras año.
Lo bonito de esta costumbre es que cada casa tiene su propia versión: hay quien ata el ramo con una cinta roja, quien lo acompaña de una oración, quien lo coloca siempre en el mismo sitio… Lo que nunca cambia es el significado: cuidar, proteger y mantener viva una conexión con la tierra y con los que nos precedieron.
❤️ Somos muy de pueblo. Y muy del ramito de San Juan
En Quesería La Antigua nos gusta contar estas cosas. Porque no solo hacemos queso con leche de oveja, también creamos memoria, cultura y orgullo rural. Tradiciones como la del ramo de San Juan nos recuerdan que lo sencillo puede ser profundamente valioso, y que hay mucho saber popular que merece seguir vivo.
¿Y tú? ¿También cuelgas el ramo en casa?
¿Lo sigues haciendo? ¿Sabes cómo lo hacían tus abuelos?
Nos encantará que lo compartas en comentarios o en redes sociales con una foto de tu ramo. Porque las tradiciones, cuanto más se comparten, más se fortalecen.
