Hoy toca hablar de presente, sin olvidar, el pasado y mirando siempre al futuro. Y el presente es Quesoturismo.
Hablar de queso es, en la familia de La Antigua, hablar de sentimiento, de emoción, de sentarse en una mesa redonda con faldillas, al calor de la lumbre en invierno y a la fresca en verano, escuchando las historias de nuestros mayores, que si saber ni de marketing ni de quesoturismo, asentaron los cimientos de lo que es la gran familia quesera hoy en día.
Los pueblos, vuelven a llenarse en verano, vuelven los de la capital para respirar aire fresco, para reencontrarse con la naturaleza, para saludar a los vecinos al pasar a comprar a la tienda de ultramarinos. Volvemos al pueblo, volvemos a nuestro origen, a nuestras raíces. ¿El equipaje? Solo un buen cuchillo para que el corte nunca falle.
Y con la masificación del turismo en las ciudades y el entusiasmo por hacer un turismo de experiencias nuevas, nace Quesoturismo en La Antigua. Bienvenidos a la mejor experiencia quesera.
Quesoturismo, un viaje de experiencias, cultura y queso
Con toda la intensidad que la leche de oveja zamorana aporta y que explica a la lengua lo que significa el origen. Legado trashumante, transmitido entre pastores, que pide al cuerpo mucho pan, un trago de vino y hacer un alto en el camino para dejarse acunar por los campos de la Meseta del Duero, donde aún reina la oveja insignia del queso zamorano, elaborado con leche cruda y popular por su marcado sabor y regusto algo picante.
Cuando el viajero, sea pareja, familia o un pequeño grupo apuesta por esta aventura de turismo y visita nuestra quesería, descubre el proceso de fabricación: por dónde entra la leche, cómo se corta con el cuajo, el momento en que se mete en los moldes, la salmuera, las cámaras de maduración… todo con las máximas medidas de seguridad.
Podrá conocer de primera mano el proceso de elaboración del auténtico queso zamorano, cuyo ingrediente básico es la leche procedente de la oveja de las razas autóctonas, churra y castellana, que pastorea todo el año aprovechando los recursos naturales de la zona. El contacto directo con la ganadería es una de las actividades más vistosas, sobre todo para los niños, porque ven de cerca a los animales, e incluso pueden cogerlos y hacerse fotografías; y si tienen suerte, conocer al pastor.
Experiencia y sentidos, un buen maridaje
Cuando uno come queso, no se para a pensar la cantidad de detalles que pasan desapercibidos. Y es que, cuando lo degustamos entran en función todos nuestros sentidos, implicando a todo el cuerpo.
Al igual que la de otros muchos alimentos y bebidas, como el vino o el aceite, la cata del queso pasa por distintas fases: visual, olfativa y gustativa, una fase táctil y la textura en boca después.
Esa sensación, la que te ofrece una combinación de diferente texturas, sabores y olores será la que te acabe conquistando. Pero recuerda, que todo tu cuerpo se prepara para recibir ese pequeño bocado celestial llamado QUESO.
En Quesería La Antigua nos volcamos en crear experiencias que emocionan y despiertan los propios recuerdos y sensaciones de aquel que las vive, y que perdurarán para siempre en su memoria.
Horarios:
De lunes a viernes: De 9:00 a 14:30 (la última hora de visita disponible a la 13:00) y de 16:00 a 18:30(última visita disponible a las 17:00)
Sábados: De 9:00 a 13:00 (última hora de visita disponible a las 11:30).
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